
Eres tu última idea pero no te olvides también de lo que hiciste con ella.
Hace unos días me preguntaban como una empresa puede considerarse creativa.
Me lanzaban que si tenían que tener un departamento de creatividad, si con el de marketing valía o tenían que contratar a alguien de alguna agencia famosa de creatividad publicitaria.
Pero todo es mucho más fácil.
¿Qué has hecho con tu última idea? les pregunté.
Se quedaron descolocados. Pensaban que había que seguir algún método más difícil, hacer un Master o leerse una trilogía de libros.
¿Qué idea ha sido la última que has tenido y qué has hecho con ella? Añadí.
La respuesta tras varios segundos de miradas al cielo y silencio molesto fue:
NO LO SÉ.
Empezando a ponerse más nerviosos intentando buscar qué habían hecho con ella.
Decir qué hemos hecho con nuestra última idea es lo que determina si somos una empresa creativa, si creemos en la creatividad o estamos apostando por ella.
No importa lo que ha pasado anteriormente. No importa la formación que tengas o las personas que hayas contratado.
Nada importa si con la última que hemos tenido:
.- No la hemos ni siquiera apuntado
.- Ni siquiera la hemos apuntado para desarrollarla con tiempo
.- Nos hemos reído de ella al exponerla y también de la persona que la ha expuesto
.- No le hemos dado la oportunidad a alguien que nos presente un informe con su posible impacto.
No podemos hablar de innovación y de muchas cosas más, cuando no hemos hecho nada con la última idea que hemos tenido.
Queremos vivir de las «rentas», de éxitos pasados y de etiquetas nuevas.
Pero si realmente quieres saber si eres creativo o no, pregúntate:
¿Cuál es la última idea que tuve y qué hice con ella?