
Hablamos mucho. Escribimos más. Pero no queremos escuchar.
Hablamos de métodos de ideación, del poder de las ideas, de cómo ser innovadores de la noche a la mañana,…pero eso de escuchar a los demás, ya es otro rollo.
Uno de los problemas más importantes del no desarrollo de la creatividad dentro de uno y en la empresa, es la NO ESCUCHA.
Cuando no están de acuerdo con nuestras ideas, pensamos que nos están atacado a nosotros.
Cuando no estamos de acuerdo con las ideas de la empresa, nos etiquetan de «subversivos» y con la carta de despido ya redactándose.
Cuando escuchamos ideas diferentes a las nuestras en un proceso creativo, en vez de preguntarnos «¿Y por qué no? , lo único que decimos es «eso es una autentica locura imposible…¿A dónde vas? deja de soñar».
A lo largo del día todos oímos pero la realidad es que no escuchamos nada que no sea lo que queremos oír.
¿Y eso nos hace más creativos? ¡NO! Solo nos encierra en nuestro mundo rechazan a las primeras de cambio, toda idea
Durante la jornada laboral oímos muchas cosas. Pero solamente escuchamos aquello que nos puede venir bien para nuestros intereses profesionales. ¿Lo demás? lo rechazamos.
Nuestras creencias, experiencias, nuestro miedo, nuestro ego a perder le puesto que hemos alcanzado, hacen la labor de barrera o por burocracia, son las barreras que nos limitan a escuchar solamente lo que queremos o lo que nos hace menos daño a «nuestro bolsillo». En vez de escuchar ideas que pueden hacer más fuertes y mejor las nuestras, darnos cuenta de errores que no queremos admitir y subsanarlos o vislumbrar un nuevo horizonte que no veíamos, lo tapamos. ¿Y todo por qué? Porqué no entra dentro de nuestra «abanico» de ideas coherentes.
Nos gusta hablar del feedback y su importancia en la creatividad. Y aunque es una herramienta imprescindible y que daría resultados increíbles, nunca hablamos que antes, tenemos que saber escucharnos y escuchar a los demás, sin miedos ni prejuicios.
Respecto a este tema hay otro tema que me gustaría tocar. Una y otra vez en los medios de comunicación, se hablan de las ideas «locas«. Son aquellas que etiquetamos así, porqué pensamos que son imposibles, porqué hasta la fecha nunca las habíamos escuchado.
A lo largo de «Mentes Creativas» cada día creo más que no existe una idea loca. Lo que existen son ideas inherentes a nuestra forma de ver el mundo que en un momento determinado, a la desesperada, nos atrevemos a expresar sin miedo al qué dirán.
No existen las ideas locas, lo que existe es un miedo y rechazo a escuchar ideas que no son nuestras, que no están dentro de las normas. Y son los demás quienes las etiquetan como locas, cuando en realidad para nosotros, son de lo más normal.
La locura es lo que nosotros consideramos fuera de nuestros límites…Y mientras nos seguiremos perdiendo oportunidades de desarrollo por no querer escucharlas.
¿Qué ocurriría si escucháramos más las ideas nuestras y las de los demás, no esperando al último momento, como último recurso?
.- Anticiparíamos problemas de los que luego nos lamentamos.
.- Haríamos participes a las personas del día a día de la empresa.
.- Descubriríamos errores antes que lamentos.
.- Desarrollo continuo del talento de los integrantes de la empresa.
.- A mayor diversidad, mayor creatividad dentro de la empresa.
.- Respetaríamos más a la gente y a nosotros mismos. El liderazgo sería mucho mejor.
Una y otra vez vemos que escucharnos y escuchar a los demás, favorecería a la creatividad. Pero sin embargo, seguimos haciendo oídos sordos.
Escúchate sin prejuicios antes de escuchar a los demás. Hasta que no lo hagas, nunca oiras a la otra persona y mucho menos a sus ideas.